Politólogo de la UdeA recibe el premio Otto de Greiff por su trabajo de grado

El politólogo Andrés Felipe Lázaro Parra, obtuvo el primer puesto en el Concurso Nacional de Mejores Trabajos de Grado Otto de Greiff, en la categoría de Ciencias Sociales. con su trabajo “Gobernar lo ingobernable. Mecanismos institucionales para la gestión de los jóvenes en Medellín (1995-2011).

En este concurso se evalúan los mejores trabajos de grado, de pregrado, realizados en el año anterior a la convocatoria del Concurso, en cada una de las Universidades. Participan los trabajos que hayan sido seleccionados mediante un concurso interno, entre aquellos que obtuvieron menciones honoríficas, meritorias, laureadas o premios especiales.

Andrés Lázaro analiza en su monografía los efectos que se generan en Medellín debido a las interacciones entre agentes estatales y jóvenes en la puesta en funcionamiento de la Corporación Mixta Paisajoven y los Consejos Municipales de Juventud, que se crearon para darle respuesta a la crisis que tuvo la ciudad en los ochenta y noventa, en donde la sociedad en general empezó a ver a los jóvenes como problema debido a la violencia, pero también como esperanza de futuro.

La idea de la investigación surgió gracias a un tema que estudiaba Lázaro en el grupo de investigación de Campo estatal de hegemonías, guerras y conflictos, donde el asunto giraba en torno a las disputas entre agentes del Estado y milicias populares de Medellín en los ochentas y noventas. Durante el proceso de investigación se dio cuenta que se hacía alusión constante a la idea de que los jóvenes eran el problema de la ciudad, los que generaban la violencia. Pero también que los jóvenes eran quienes tenían que renovar el aparato institucional, quienes participaran en política, la generación del futuro.

En su investigación identificó que el magnicidio del entonces ministro de Justicia Rodrigo Lara Bonilla, perpetrado por jóvenes, hizo que se pusiera el foco sobre la violencia proveniente de los jóvenes, además de la visibilización a nivel nacional de la figura del sicario. Sin embargo, encontró que también había un gran número de jóvenes que empezaban a reclamar espacios de participación política y esto conllevó a procesos como el de la séptima papeleta y el surgimiento de movimientos juveniles y sociales.

“Entonces la idea del joven como esperanza de futuro también empieza a coger fuerza y se mantiene una dualidad y decir que los jóvenes son un problema, son violentos y al mismo tiempo afirmar que los jóvenes deben ser la esperanza del futuro, quienes transformen esta ciudad, quienes renueven el aparato institucional del Estado haciendo uso de los mecanismos institucionales que el Estado crea para los jóvenes”, cuenta Andrés Lázaro.

En ese contexto es donde el Estado comprende que necesita generar diálogos con los jóvenes, pero no tenía un lenguaje común con ellos para hacerlo y es a través de estrategias de gestión de los jóvenes que hace esos intentos. La Corporación Paisa Joven y los Consejos Municipales de Juventud se convierten en esos espacios que pretenden mejorar la calidad de vida de los jóvenes y terminan enseñándoles a generar proyectos.

Andrés explica que ese lenguaje común en un primer momento “lo establece la Corporación Paisajoven enseñándole a los jóvenes cómo presentar, gestionar y ejecutar proyectos y ese proceso enseñarles a los jóvenes a hacer proyectos para que gestionen recursos con el Estado o con cooperación internacional, lo que está es tejiendo los elementos básicos para establecer las primeras bases de esa relación”.

Pero no solo recibieron información por parte de agentes estatales, sino que con una agencia política definida e intereses políticos propios llevaron a cabo sus proyectos con otros entes de cooperación internacional. 

En el contexto académico, la violencia en Medellín es uno de los temas sobre los que hay gran producción y por eso Andrés Lázaro comenta que “el principal reto fue hablar de eso sin lugares comunes, que no fuera reiterativa ni repetitiva”.

El Concurso Nacional de Mejores Trabajos de Grado Otto de Greiff, es un certamen conjunto de las universidades: Nacional de Colombia, Antioquia, los Andes, Pontificia Bolivariana, Javeriana, del Norte, del Rosario, Industrial de Santander y del Valle, para promover la investigación y las comunidades académicas.

En este concurso se evalúan los mejores trabajos de grado, de pregrado, realizados en el año anterior a la convocatoria del Concurso, en cada una de las Universidades. Participan los trabajos que hayan sido seleccionados mediante un concurso interno, entre aquellos que obtuvieron menciones honoríficas, meritorias, laureadas o premios especiales.

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